Exigen exhumar cuerpos de fosas clandestinas
Se manifiestan en Palacio de Justicia en Cuautla
Cuautla, Mor.- Integrantes del Movimiento nacional por nuestros desparecidos en México provenientes de los estados de México, Nuevo León, Michoacan, Guerrero, Jalisco, Morelos y Ciudad de Mexico se manifestaron frente al palacio de justicia en la ciudad de Cuautla conocida como Ciudad Judicial para exigir la exhumación de los 150 cuerpos que se encuentran en las fosas clandestinas de Tetelcingo, para que sean debidamente identificados según los protocolos establecidos.
Valentina Peralta Puga, coordinadora de la Red Eslabones por los Derechos Humanos habló del objetivo de la manifestación “lo que están buscando son a sus seres queridos desaparecidos, secuestrados, hijos, padres, hermanos, esposas, esposos y sabemos que las fosas “clandestinas”, que realizó la Fiscalía de Justicia en Morelos, de manera irregular, en un predio en la comunidad indígena de Tetelcingo, en la ciudad de Cuautla, puede darles una pista”.
Afirmó que se encuentran 150 cuerpos sin identificar, a quienes ni siquiera les practicaron las pruebas periciales básicas que son la toma de muestra biológica para tener el perfil genético y la superposición antropomórfica que son radiografías y fotografías al cráneo y restos, para poder cotejar con los seres humanos que se buscan.
“Sabemos que no lo hicieron, explicó, por eso nosotros tenemos que exigir que esos cuerpos sean procesados uno por uno, conforme a derecho, es decir, que se exhume cuerpo por cuerpo ante la presencia de peritos de la PGR, de la Policía Federal, de personal de la UAEM, de la Comisión Nacional de Derechos Humanos y de la Oficina del Alto Comisionado, para que se obtengan los perfiles genéticos de cada ser humano que ahí se encuentra, para que sea cotejado con los perfiles genéticos que han aportado los familiares de los desaparecidos”.
Y recalcó, “Queremos que el 28 de marzo saquemos el primer cuerpo de esa fosa, porque el 28 de marzo los sepultaron ahí, porque el 28 de marzo mataron a un grupo de jóvenes, entre ellos el hijo de Javier Sicilia, porque el 28 de marzo Graco dijo que era el día de la víctima, porque ese día mataron a un grupo de seres humanos en Tamaulipas y los depositaron en fosas, por eso el 28 de marzo es un día simbólico donde vamos a sacar contra viento y marea el primer ser humano de las fosas de Tetelcingo, pese a quien le pese”.
Peralta Puga lamentó que la respuesta del gobierno de Graco Ramírez sea la complicidad a favor de la impunidad, porque después de seis horas de discusión con funcionarios del gobierno del estado, en una reunión realizada hace dos meses en el palacio de gobierno, llegaron a acuerdos, levantaron una minuta, que después los funcionarios ya no quisieron firmar, una vez que se retiraron a un evento al que les había convocado el mismo gobernador.
Lleva casi cuatro años buscando a su hija
Claudia Vargas, una joven madre proveniente de Monterrey, Nuevo león busca a su hija Miroslava Reyes Vargas, quien desapareció el 24 de marzo de 2012 a la edad de 17 años, en compañía de dos de sus amigas, afirma que se encuentra muerta en vida.
Como su hija son casi tres mil las personas desaparecidas por diversas causas, cuyos familiares han encontrado en las organizaciones civiles, cierto consuelo y organización, que les permite continuar adelante a pesar de las autoridades en cada uno de sus estados.
“Desde que desapareció mi hija (nos compartió Claudia parte de su historia), al parecer levantada por extraños cuando se encontraba con sus amigas Alejandra Mairani Tamez Rodríguez y Leslie Yaretzi Salzar Treviño, no sé de su paradero, la he buscado y nadie me da respuesta, las autoridades escuchan, pero no escuchan”.
“No hemos recibido, dijo, una respuesta favorable, por eso venimos a Morelos, por eso fuimos a la Ciudad de México para hablar con las autoridades federales e investigar en donde apenas exista una pista, una esperanza. Ojalá a nivel federal encontramos algún tipo de resultados”.
Pero su mensaje fue no sólo para las autoridades, también para los ciudadanos en quienes esperan encontrar esas fuerzas que por momentos necesitan, “le pedimos a la sociedad que no sea insensible al dolor que sentimos como madres, pues nosotros vivimos, por vivir, nos encontramos muertas en vida prácticamente. Al principio yo quería morirme, pero ahorita necesito fuerza para poder seguir en la búsqueda de mi hija, y no voy a parar hasta que la encuentre, como la tenga que encontrar”.